A LA LLEDONERA

 

Señora, mí gran Señora

mucho te pido

poco te ofrezco

tanto que me das

y aún me quejo.

Eres mi madre

y se que me quieres

porque a pesar de mi olvido

nunca me hieres

llenas mi vida de amor

y la vacías de dolor

llenas mi vida de esperanza

y apartas de mi la venganza

quiero que estés siempre en mi

corazón, y en mi pensamiento

recordarte y quererte a cada momento

Señora, mi gran Señora

siempre serás en mi vida

mi luz y mi guía.

 

Autora: Encarnación Gascó

Publicado en el Boletín nº25 de 2012